TEST AUTO-CUESTIONARIO
11 julio 2020ÓRGANOS DEL SISTEMA LINFATICO
12 julio 2020El sistema linfático es una parte vital del sistema inmunitario, junto con el timo, la médula ósea, el bazo, las amígdalas, el apéndice y las placas de Peyer en el intestino delgado.
El sistema linfático transporta líquidos a lo largo de todo el cuerpo, del mismo modo que lo hace el sistema venoso.
El sistema linfático está formado por:
- Vasos linfáticos de paredes delgadas
- Ganglios linfáticos
- Dos conductos colectores
Los vasos linfáticos, localizados por todo el cuerpo, son más grandes que los capilares sanguíneos (los vasos sanguíneos más pequeños y que conectan las arterias y las venas) y la mayoría de ellos son de menor tamaño que las venas más pequeñas. Casi todos los vasos linfáticos tienen válvulas similares a las de las venas para que la linfa, que se puede coagular, circule en un único sentido (hacia el corazón). Los vasos linfáticos drenan un líquido llamado linfa procedente de los tejidos de todo el organismo.
La linfa
La linfa es un líquido transparente que recorre los vasos linfáticos. Se produce por el exceso de líquido que sale de los capilares sanguíneos al espacio intersticial o intercelular, el cual es recogido por los capilares linfáticos que drenan a vasos linfáticos más gruesos hasta converger en conductos que se vacían en las venas subclavias.
La linfa es un líquido claro pobre en proteínas y rico en lípidos. Se diferencia de la sangre en que no transporta oxígeno y carece de hemoglobina y glóbulos rojos, las únicas células que contiene son los glóbulos blancos (linfocitos). Puede contener microorganismos que, al pasar por el filtro de los ganglios linfáticos, son eliminados. El cuerpo humano produce alrededor de 3 litros de linfa al día que se incorpora poco a poco a la sangre. La linfa recorre el sistema linfático que está dotado de una serie de válvulas que impiden el retroceso del fluido.
Si un vaso linfático sufre una obstrucción, el líquido intersticial se acumula en la zona afectada, produciéndose una hinchazón denominada linfedema.
La linfa realiza tres funciones principales:
Transporte del líquido intersticial hacia la sangre. En el espacio situado entre las células se encuentra el líquido intersticial que se genera continuamente procedente de la circulación sanguínea. El exceso de líquido intersticial fluye hacia los capilares linfáticos que lo devuelven hacia el sistema venoso.
Transporte de las grasas procedentes de la dieta. Las sustancias grasas procedentes de la dieta son absorbidas a través de las células de la pared intestinal (enterocitos). Estás células fabrican unas partículas complejas cargadas de triglicéridos que reciben el nombre de quilomicrones. Los quilomicrones pasan a formar parte de la linfa que los traslada hasta la sangre. La linfa es por tanto imprescindible para la asimilación de las grasas procedentes de los alimentos. La linfa proveniente del intestino. Después de una comida abundante, es muy rica en grasas y tiene en aspecto cremoso, por lo que recibe el nombre de quilo.
Respuesta inmunitaria. Los vasos linfáticos atraviesan los ganglios linfáticos en los que se localizan diferentes células del sistema inmune, principalmente linfocitos, los cuales atacan y destruyen los microorganismos y actúan como factor defensivo frente a infecciones por agentes externos.
Composición
Su composición es similar a la del plasma sanguíneo. Contiene agua, proteínas y grasas procedentes de la absorción intestinal en forma de quilomicrones. Asimismo, cuenta con linfocitos y, en ocasiones, gérmenes que son captados y destruidos en los ganglios linfáticos.
La composición de la linfa varia dependiendo del lugar del cuerpo en que se forma. Si procede de los miembros superiores o inferiores tiene apariencia cristalina. Sin embargo la que se forma en el intestino, especialmente después de una comida copiosa, es rica en ácidos grasos, lo que le da un aspecto blancuzco (quilo).